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Tips para acceder al mercado laboral

Fecha:27 Oct 2022
Número de comentarios:1

  • El camino hacia el empleo no es un trayecto llano para la gran mayoría de jóvenes
  • Los jóvenes con discapacidad todavía tienen más complicado el acceso al mundo laboral
  • Contar con la información y las herramientas adecuadas es el principio de un gran viaje

 

A nivel empleabilidad, el objetivo de todos, incluída la Organización de las Naciones Unidas, es muy concreto. Tanto es así, que uno de los puntos que contempla la Agenda 2030 propuesta por la ONU, es el ODS número 10, cuyo principal objetivo es reducir las desigualdades.¿Cómo hacerlo? Eliminando las barreras que impiden un mercado laboral inclusivo es una de las formas que se nos ocurren. 

 

Mientras, por su lado, el mercado trabaja en nuevos mecanismos para que cualquier joven tenga acceso a un puesto de trabajo, los jóvenes no podemos quedarnos de brazos cruzados. Así que, si quieres encontrar el trabajo de tus sueños, te sugerimos que te prepares bien… ¡Nadie dijo que fuera fácil!

 

Paso 1: ¿Dónde quieres llegar?

 

De nada sirve empezar a caminar si no tenemos un destino claro, ¿verdad? Lo mismo ocurre con los puestos de trabajo. Antes de empezar la búsqueda de empleo, debes tener claro a qué te quieres dedicar: ¿dónde te ves trabajando?, ¿te haría ilusión levantarte cada mañana para acudir a ese puesto de trabajo?, ¿serías feliz?, ¿qué podrías aportar a la empresa que te contrate?

 

Paso 2: ¡Trazamos una estrategia!

 

Si ya has decidido, por ejemplo, que quieres ser peluquero, levantarte todos los días para peinar a tus clientes y que tu originalidad es el punto diferencial con el que puedes sorprender a la empresa que te vaya a contratar… ¡vamos a crear un currículum!

 

Tips para acceder al mercado laboral

¡Manos a la obra!

Un CV no es más que una carta de presentación en la que explicas dónde has estudiado, qué formación tienes sobre la posición para la que quieres postular y si dispones de experiencia previa en el sector. También puedes contar cuales son tus aficiones, enlazar a tu blog o página web -si lo tienes- e indicar, en una carta de motivación, qué te hace único para ocupar ese puesto.

 

¡Ah, y no te olvides del diseño! Tener un CV atractivo es, en ocasiones, el gran secreto del éxito.

 

Paso 3: Manos a la obra

 

Cuando ya sabes lo que quieres y tienes tu propia estrategia diseñada es momento de empezar la búsqueda. 

 

Son muchas las plataformas para la búsqueda de empleo, y pocos los consejos que necesitas para empezar a “lanzar currículums”.

 

  1. No todo vale: Léete bien las características de la oferta y aplica solo si te gusta lo que proponen y si tu perfil encaja. De lo contrario, solo te crearás falsas expectativas sobre posiciones que, ni te gustan, ni van contigo. 
  2. Amplía la información si es necesario: Muchas ofertas de trabajo requieren de una carta de presentación. Es, ni más ni menos, que un breve texto en el que indicas tus ganas de ocupar ese puesto y tus habilidades para hacerlo. ¡La originalidad y la sinceridad a la hora de redactarla seguro que puntúan doble!
  3. Llénate de paciencia. Por norma general, los procesos de selección tienden a ser largos y tediosos. No desesperes si no te dan respuesta de inmediato.

 

Paso 4: El momento de la verdad

 

¿Te han llamado y te convocan a una entrevista? Ten muy claro que eres un candidato que encaja perfectamente en lo que están buscando, de no ser así no te hubieran llamado. Así que relájate y asiste a la entrevista con un único objetivo: ser tú mismo.  

 

  • Vestimenta para una entrevista de trabajo: arréglate pero sin pasarte. No como te arreglas para ir a una discoteca, sino como lo haces para ir a una comida familiar. Ponte esa ropa elegante con la que no dejas de ser tú.
  • Emplea un lenguaje con el que te sientas cómodo: no intentes usar palabras ni conceptos que no forman parte de tu vocabulario habitual. Te provocará nervios innecesarios.
  • Sé sincero y humilde: engañar no sirve de nada. Muéstrate abierto a aprender nuevas técnicas, pero nunca asegures que sabes hacer algo que, en realidad, no sabes.

 

Llegados a este punto, la suerte ya está echada. Ojalá te llamen para decirte que el puesto es tuyo pero si no lo hacen, tranquilízate. No todo empieza y termina en ese puesto de trabajo, ¡hay a cientos y uno de ellos será para ti!

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