El transporte facilita la movilidad de las personas, permitiendo sus desplazamientos tanto a entornos laborales o educativos como de ocio. No entenderíamos la vida sin medios de transporte.
Dada la importancia del transporte, este debe ser accesible, es un derecho que impide la discriminación en su uso. Las personas con discapacidad han de poder hacer uso de él, ya se trate de autobuses, vehículos propios, aviones, trenes, metros, autocares, etc.
Hay ciudades que llevan muchos años haciendo de sus instalaciones, monumentos, calles, etc. inclusivas, para que ningún ciudadano se sienta excluido, aunque hay otras a las que les cuesta adaptarse en cuestiones tan importantes como rebajes de aceras, autobuses accesibles, semáforos sonoros, taxis adaptados, etc.
Y una de las cuestiones más importantes para que las ciudades sean inclusivas es que los medios de transporte, tanto públicos como privados, ofrezcan opciones accesibles y adaptadas a las necesidades de todos los usuarios.
La normativa que vela por la accesibilidad en el transporte es Real Decreto 1544/2007, de 23 de noviembre, que regula las condiciones básicas de accesibilidad, no discriminación para el acceso y utilización de los modos de transporte para las personas con discapacidad.
Medios de transporte público
Lo público es común, es de todos. Por eso, el transporte público está adaptado para el disfrute de las personas con discapacidad. Autobús, metro, tranvía, tren, barco o avión.
En el caso del metro, algunas estaciones antiguas todavía no están adaptadas para personas con movilidad reducida, pero las modernas incluyen todo tipo de dispositivos accesibles (rampas, ascensores, suelo rugoso para ser reconocido por el bastón, señales acústicas y luminosas, etc.)
Los autobuses, urbanos o interurbanos, están adaptados sin excepción para personas con movilidad reducida, pero no todos cuentan con dispositivos accesibles para personas sordas, al igual que sucede con barcos y aviones. En cambio, en los trenes de cercanías, pocas de sus estaciones están adaptadas.
Si vas a utilizar algunos de estos medios, te recomendamos que te informes antes para asegurar que tanto el lugar de partida como el de destino es accesible.
Medios de transporte privado
Pese a no ser gestionados por entidades públicas, muchos de ellos han ido incorporando medidas de accesibilidad dirigidas a personas con discapacidad.
- Vehículos adaptados: Hay multitud de ayudas económicas para adaptar un coche a las necesidades específicas de su conductor, con independencia de la discapacidad de que se trate. Numerosos talleres especializados pueden hacerlo.
- Taxis o VTC: Muchas ciudades disponen de vehículos especialmente equipados para personas con discapacidad.
Servicios de apoyo para personas con discapacidad
Algunos de los medios de transporte mencionados anteriormente disponen de servicios específicos para los usuarios con discapacidad. Estos son los más importantes.
- Tren: tanto para cercanías como para largo recorrido, puedes solicitar el servicio Atendo.
- Avión: AENA también ofrece a sus clientes, en cualquier aeropuerto español, un servicio de atención especial.
Recuerda que, ante cualquier duda que pueda surgirte, puedes ponerte en contacto con nosotros en el correo: consultas.inserta@fundaciononce.es